Padres “de prueba”

Hace unos años el gobierno ruso empezó a mostrarse preocupado por la gran cantidad de niños huérfanos. La adopción por extranjeros, que empezó a crecer notablemente en los años 90, permitió reducir el número de los niños abandonados. Pero esta medida tampoco se consideraba una buena solución. “Los niños rusos deben quedarse en su país de origen”, este fue el lema del gobierno de Putin, que propuso un programa destinado a incentivar a las familias rusas a adoptar niños…
 
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