Soy Adoptado

Entre padres adoptivos e hijos adoptados se va creando poco a poco un vínculo y lo que más desean ambos es que sea lo más sano, sólido y consistente posible. Esto es, un vínculo de apego de tipo seguro.

Para que una relación cuente con características sanas y cubra las necesidades emocionales del pequeño de forma sensible y estable, es fundamental que las personas significativas para el niño calmen sus miedos y angustias dando una respuesta emocional adecuada en intensidad, forma, calidad, tiempo y cercanía. Si ponen nombre a lo que el niño siente y consiguen transmitirle tranquilidad, se sentirá seguro con respecto a sus figuras de apego. Esto es, él sabrá que aunque tenga miedo, sus papás le calmarán. Esta seguridad la irá interiorizando poco a poco y se convertirá en una persona segura de sí misma y con una buena autoestima.

Del blog Alma, Corazón y Vida con interesantes reflexiones

 

Si este artículo te parece interesante, compártelo.
Facebook Twitter Plusone Linkedin Pinterest