Dieciséis adolescentes, niños con discapacidad y grupos de hermanos buscan familia en Galicia

Son mayores de ocho años, forman parte de un grupo de hermanos o tienen alguna discapacidad física o mental. Este es el perfil de los menores que llevan años a la espera de una familia en las casas de acogida de Galicia. En la actualidad, hay dieciséis pequeños en esta situación ya que, según denuncian desde la asociación Faiben -que, junto con la Xunta, gestiona este tipo de adopciones-, «la mayoría de los padres solo quieren bebés». El proceso de adopción, en estos casos, suele ser más corto ya que apenas hay esperas y, en el momento en el que se concede el certificado de idoneidad, la demora puede limitarse a unos meses.

Mientras cientos de gallegos esperan años, recorren miles de kilómetros e, incluso, viajan hasta la otra punta del planeta para adoptar un bebé, casi una veintena de menores ve pasar su infancia y adolescencia en casas de acogida de Galicia sin poder cumplir su sueño de formar parte de una familia. Son, en su mayoría, grupos de hermanos, pequeños con alguna discapacidad física o psíquica o niños que ya tienen cierta edad cuando su situación familiar se llega a clarificar. La Xunta colabora desde hace seis años con el programa de adopciones especiales Adoptar é Posible, de la Fundación de Apoio á Infancia e ao Benestar (Faiben), para buscarles un hogar.


«En seis años, hemos encontrados familias para 26 menores y, en estos momentos, son dieciséis los niños y adolescentes que aguardan en casas de acogida a ser adoptados», explica el presidente de Faiben, Ángel Martínez, quien asegura que el proceso de adopción, en estos casos, suele ser más corto puesto que apenas hay esperas y, en el momento en el que la Xunta concede el certificado de idoneidad a la familia, imprescindible en cualquier adopción, la demora puede limitarse a unos pocos meses. «Al principio hay que hacer una reflexión muy profunda con los futuros padres. Después de la primera entrevista, si siguen adelante, se organiza un segundo encuentro en su casa, para conocerlos más a fondo», indica Martínez.

El siguiente paso, cuatro sábados «de formación» con otros solicitantes y con una familia que ya adoptó y que les cuenta «lo rosa, lo bonito, pero también la parte más complicada». Luego, un año de acogimiento preadoptivo, antes de la integración plena. «Durante ese tiempo, unos dos años, la familia contará con el apoyo de nuestros técnicos, para ayudarles a resolver todas sus dudas y asesorarles en caso de que a los niños les cueste adaptarse o se produzca cualquier problema, por ejemplo, en el colegio», apunta el presidente de Faiben, y aclara: «Se ha establecido que el acompañamiento se prolongue dos años porque es el tiempo que habitualmente tarda en arreglarse todo el papeleo judicial», destaca.

Martínez sostiene que la mayor parte de las parejas que se interesan por las adopciones especiales son jóvenes. «La edad media ronda los 40 años, y no siempre son parejas, sino que a veces se trata de mujeres, e incluso hombres, en solitario», indica, y continúa: «Cuando iniciamos el programa de adopciones especiales, pensábamos que el perfil mayoritario sería el de parejas mayores que ya tienen a sus hijos criados pero, sorprendentemente, no ha sido así», subraya el presidente de Faiben.

Todos los menores que forman parte del programa de adopciones especiales proceden de un entorno desestructurado y, por ello, desde Faiben se destaca que los beneficios para estos pequeños, tanto a nivel afectivo como social, son innumerables. «Todos mejoran porque pasan de no tener a nadie a contar no solo con unos padres, sino también con unos abuelos, unos tíos, unos primos… a formar parte de una familia, con todos los derechos que eso conlleva, y a integrarse completamente en la sociedad», remarca Martínez, quien reconoce que quienes suelen tener más difícil ser adoptados son los grupos de hermanos y los adolescentes. «La gente cree que un chaval de 15 o 16 años ya está formado y eso les da miedo, pero no es así. De hecho, le va a dar el mismo cariño que cualquier otro hijo, o incluso más», afirma.

Uno de los objetivos fundamentales de Faiben es minimizar al máximo el posible rechazo de niños o padres. Y es que, de los 26 menores que salieron de este programa de adopciones especiales, cinco no concluyeron el proceso.

Las personas interesadas en recibir información, sin compromiso, sobre el programa de adopciones especiales pueden hacerlo en la web www.faiben.org  en el teléfono 902 404 224 o a través del correo electrónico faiben@faiben.org.

Fuente: La Opinion Coruña

Si este artículo te parece interesante, compártelo.
Facebook Twitter Plusone Linkedin Pinterest