Del blog de la Fundación Love Without Boundaries España
Adopté a mi hijo, al que le falta parte de su brazo, hace 6 años. Es un niño tan encantador y cariñoso, que no pasa ni un solo día sin que de gracias por el privilegio de ser su madre. Sin embargo, hay 3 cosas que me gustaría haber sabido sobre criar un niño con una necesidad especial visible.
1) Desearía haber sabido que un nº increíblemente grande de padres, no se toman el tiempo de enseñar a sus hijos que señalar a alguien que es diferente NUNCA JAMÁS es aceptable. Muchos niños (y adultos) reaccionan terriblemente mal cuando ven a alguien con una necesidad visible. Desearía que mas padres fuesen proactivos y explicasen a sus hijos que solo porque alguien parezca diferente, no es correcto jamás, susurrar, reírse o decir cosas desagradables. Si eres un padre que nunca ha tenido esa charla con sus hijos, por favor, hazlo hoy. Burlarse de alguien que parece diferente está mal.
2) Desearía haber sabido que tenía que prepararme para saber como reaccionar en público, cuando la gente fuese desagradable con mi hijo. Las primeras veces que sucedió, supongo que estaba tan aturdida que las emociones se desbordaron, y salió la mamá osa. Es importante tener un plan para toda la familia, incluyendo a los otros niños, sobre como deseamos responder. Esto puede ser muy enriquecedor para el niño, al saber que toa la familia está detrás de él, respaldándole, cuando la gente no está siendo amable. En nuestra familia, pasamos por alto los comentarios de los niños menores de 7 u 8 años la mayor parte del tiempo (incluso si no son muy correctos), ya que suele ser mas curiosidad que crueldad. Pero cuando son mayores de 8 años, si alguien se ríe o señala a mi hijo, le pregunto donde están sus padres, o lo llevo a un lado y le digo lo maleducado que está siendo. A menudo recibo llamadas de teléfono de padres que han adoptado niños con falta de miembros, que me dicen que no se dieron cuenta de lo poderosos que serían sus sentimientos de ira, cuando alguien se burla de sus hijos.
3) Desearía haber sabido todo lo que mi hijo me enseñaría sobre perseverancia y superar obstáculos. Es una inspiración para mi. Recuerdo estar sentada con una maestra de preescolar,que me decía todas las cosas que TJ nunca podría hacer, como ensartar cuentas o utilizar tijeras. Mientras, mi hijo «no me digas que no puedo hacerlo» estaba sentado detrás de ella haciendo un collar de bolitas a su manera especial. Me ha enseñado que incluso cuando otros intentan hacerte sentir diferente o te dicen que algo es imposible, con ingenio y fuerza interior, puedes alcanzar lo que quieras.
Fuente: Blog de la Fundación Love Without Boundaries España
