El «Centro para niños, familias y comunidades saludables» de la Universidad de California en Los Angeles y la «División de adopciones» del departamento de servicios a la niñez del condado de Los Angeles, recopilaron las siguientes recomendaciones para los futuros padres adoptivos y concienciar a la población sobre la adopción.
Obtenga toda la información disponible sobre el niño. Pida información sobre los antecedentes del niño, su estado y comportamiento actuales, así como necesidades especiales que pueda tener en el futuro. Los padres bien preparados tienden a ser padres adoptivos más satisfechos.
Preste atención a sus sentimientos respecto a los padres biológicos. Evalúe sus sentimientos respecto a los padres biológicos y a la manera en que hablaría sobre ellos con el niño a medida que va creciendo. Tome en cuenta el nivel de confidencialidad en el proceso de adopción que mejor pueda satisfacer las necesidades del niño y de su familia.
Obtenga servicios de apoyo a familias adoptivas para la transición del niño a su hogar. El tiempo de transición es una época de esperanza, oportunidad y vulnerabilidad. El uso de estos servicios desde el inicio puede ayudar a que su familia tenga un buen comienzo y prevenir problemas serios.
Permita que el niño lamente la pérdida de relaciones anteriores. Aunque el niño pueda estar entusiasmado acerca de tener una familia adoptiva, le tomará tiempo llorar la pérdida de quienes antes lo cuidaban. Entre más apoye a su niño en su dolor, mayor será la probabilidad de que el niño pueda formar una relación allegada y confiar en usted.
Recuerde que aun experiencias menores de pérdida o cambios en la rutina pueden provocar temores y abandono en el niño. Salir de vacaciones, familiares que llegan de visita y se van o la pérdida de una mascota o juguete pueden trastornar al niño y hacer que se deteriore temporalmente su comportamiento.
Espere que haya problemas ya que es común la prueba de límites en los primeros meses. Cuando el niño se comienza a dar cuenta del compromiso que usted ha hecho al adoptarlo, puede empezar a portarse mal y poner a prueba si su hogar es «para siempre». Continúe ofreciendo bases sólidas y recuerde que al enfrentar juntos las dificultades se estrechará más y más el vínculo entre ustedes.
La plática sobre la adopción es un proceso continuo. Entre más relajado esté usted al hablar acerca de la adopción y entre más dispuesto esté a responder a preguntas relacionadas a la adopción, mejor será la comunicación con el niño. La comprensión del niño respecto a la adopción cambia según crece y madura.
Comparta información con el niño sobre su pasado de en una manera honesta y cariñosa. Esta información puede ayudar al niño a comprender el por qué sus padres biológicos no fueron capaces de criarlo; que las circunstancias que llevaron a la adopción no fueron culpa del niño; que el niño no hubiera podido hacer nada para cambiar la situación de sus padres biológicos y que sus padres tenían cualidades y defectos.
Sea discreto y cuidadoso si decide compartir detalles sobre los antecedentes del niño con amistades. Recuerde que esta información es parte intrínseca del niño, sea positiva o negativa. Hay demasiada información errónea sobre los niños que forman parte del sistema de hogares de crianza.
Encuentre maneras de levantarse el ánimo y recuerde que ustedes no tienen que ser los «padres maravilla». La crianza de los niños es un trabajo regocijante y exigente, que no tiene garantías. El perfeccionismo es agotador. Haga lo que esté a la medida de sus capacidades. Obtenga apoyo cuanto antes si lo necesita y asegúrese de cuidar bien de sí mismo. La mayoría de los hijos adoptivos llegan a ser adultos bien adaptados. Formar una familia por adopción puede ser una experiencia ¡con muchas recompensas!
Fuente: universityofcalifornia.edu
