Del blog «Experiencias de adopción»
Algunos adoptados tienen que soportar bromas u ofensas de parte de sus pares de estudio que saben de la adopción porque se enteraron o es muy notorio debido a diferencias raciales o culturales.
Los adoptados somos un grupo de riesgo expuesto al mobbing o bullying en diferentes entornos.
¿Qué nos pone en riesgo?
Ser de una cultura y raza distinta a la mayoría de la población donde vive el adoptado con su familia adoptiva.
Tener unos valores personales y actuar con una fuerte convicción frente a nuestras creencias. En este punto, la labor de los padres adoptivos es fundamental, puesto que como padres paliativos deben proporcionar una fuerte estructura psíquica al adoptado en el tema de los valores y ayudar a su hijo adoptivo a sanar sus raíces emocionalmente.
Tener la herida de haber sido traicionados, no amados, no deseados por unos padres. Por esta herida le damos mucha importancia a ser aceptados, amados e incluidos por los amigos y pares de estudio. Esperamos demasiado de los demás Tratamos de agradar sin pensar que algunas personas tienen intenciones perversas (de bullying). Somos muy inocentes y no sabemos poner limite al acosador a tiempo.
Tener algún defecto físico muy llamativo, problemas de aprendizaje,timidez, hiperactividad o una enfermedad cuyos síntomas sean observados o molestos para los demás y se convierten en objeto de maltrato psicológico.
Algunos adoptados están muy expuestos por tener baja autoestima. El acosador detecta que tiene baja autoestima y que puede acosarlo pues no podrá defenderse ni tampoco tiene estrategias para afrontarlo y blindarse de lo que le hace su acosador.
Otros adoptados que están en grupo de riesgo son los homosexuales, los superdotados y personas con un talento prodigioso digno de la envidia de perversos y mediocres que suelen conformar el clan de bullying.
¿Qué pueden hacer los padres adoptivos para que su hijo no sea blanco de acoso en el colegio o en la universidad?
Dar una educación que fortalezca la autoestima del chico. Enseñar estrategias para defenderse de maltratadores psicológicos y poner limites a sus agresiones.
Crear un clima de confianza para que su hijo cuente lo que le hacen sus compañeros y se pueda informar a la institución educativa del mobbing.
El niño debe aprender a no ofenderse con burlas, chismes o insultos y entender qué es el acosador y quiénes lo siguen en su bullying, quiénes tienen un problema psicológicos y que por esta razón maltratan.
Los padres deben aprender a hablar de la psicopatía y de la enfermedad mental como un tema normal de conversación con sus hijos y no considerarlos tema tabú Si tienen alguna dificultad en ayudar a su hijo pueden buscar la asesoría de un psicólogo externo (no el que trabaja en la institución educativa) porque no va a poder darle un manejo objetivo al caso pues trabaja para el beneficio de la institución y no de un paciente particular.
Proteger a su hijo de un intento de suicidio o conducta destructiva (consumo de drogas, hacerse cortadas,por ejemplo).
Enseñarle a crecer como persona a partir de la experiencia de rechazo,transformando el trauma del mobbing en una experiencia positiva de aprendizaje para su vida adulta.
Fuente: Blog «Experiencias de adopción»
