España es uno de los países que más niños adopta, pero las cifras han disminuido en los últimos años en, aproximadamente, un 50 por ciento. Los países de origen donde más adopciones se llevan a cabo son Rusia, Etiopía, China y Colombia. Pero al endurecer las normas de adopción muchos españoles han decidido zanjar el tema de las adopciones internacionales “porque son demasiados inconvenientes que a la larga hacen mella en las personas, sufrimos mucho y durante mucho tiempo”, asegura un demandante.
Antes de comenzar a desarrollar las causas de este descenso, se ha de tener en cuenta, antes de adoptar, que existen dos principios fundamentales: debe prevalecer, siempre y sobre todo lo demás, el interés del niño, y se ha de dar preferencia a las adopciones dentro del territorio nacional. Por tanto, las adopciones internacionales se realizarían en última instancia y como única solución después de intentarlo dentro de las propias fronteras.
Dentro de las principales causas de este descenso de niños para ser adoptados destaca el aumento de controles en los países de origen y la disminución de menores en situación de desamparo. En algunos países prefieren que esos menores estén en situaciones de esclavitud y sometimiento a que sean entregados a otros países para que formen parte de una familia.
China y Rusia son los dos principales países de origen de estos niños. Son dos ejemplos, también, de endurecimiento de las condiciones bien por razones éticas, jurídicas o por su avance socioeconómico. Siempre se ha sabido que el país chino es el que más niños ofrece al mercado de la adopción. Por ejemplo, en 2003 se adoptaron unos 80.000 menores chinos. Pero, también es cierto, que desde 2005 las cifras han disminuido de forma considerable, más de un 50 por ciento, en gran parte debido a los nuevos requisitos: los padres no pueden superar los 50 años de edad, no pueden ser homosexuales o familias monoparentales.
Otra causa de esta disminución en las adopciones puede ser que cada vez se adoptan niños de edades más avanzadas y con mayores problemas, tanto físicos como psicológicos, lo que “frena” el deseo de muchos padres. Porque lo que la mayoría de los padres desean es la adopción de niños de edades muy tempranas, bebés, casi recién nacidos, pese a ser muy complicado.
Y, cómo no, la crisis es también un motivo de este descenso de adopciones internacionales, porque la adopción supone un desembolso a las familias muy grande, de miles de euros en la mayoría de los casos. Como afirman algunos expertos, ahora estas adopciones solo se las pueden permitir funcionarios o titulados superiores.
Laura Olaso Bustillo
Fuente: inmagazine.es
