El derecho a la identidad de los niños de El Salvador

el Salvador

Durante el conflicto armado interno de El Salvador, miles de niños fueron robados y dados ilegalmente en adopción. Muchos de ellos han sido localizados en Europa.

Entre 1980 y 1992, tiempo que duró el conflicto armado interno de El Salvador, se estima que desaparecieron cerca de 9.000 personas, entre ellas miles de niños. Desde el fin de la guerra, la organización salvadoreña de derechos humanos Pro-Búsqueda ha podido esclarecer más de 350 casos de menores desaparecidos. En el marco de este trabajo, el asesor psicológico y experto en la materia Ulf Baumgärtner ha acompañado muchos reencuentros familiares en El Salvador. Y ha sido testigo de las esperanzas y expectativas, los miedos, las lágrimas, los silencios y la alegría inherentes a estos encuentros excepcionales.

En entrevista con Deutsche Welle, Baumgärtner cuenta que la mayoría de los niños desaparecidos han sido encontrados en El Salvador, EE.UU. y Europa. Italia y Francia son los países europeos donde Pro-Búsqueda ha hallado el mayor número de estos jóvenes salvadoreños, seguido de Gran Bretaña, Países Bajos, Bélgica, Suecia, España y Suiza. Según el experto alemán, las huellas de los desaparecidos también llevan a Alemania, sin embargo, la pesquisa en territorio germano aún no ha dado frutos concretos.

Búsqueda de desaparecidos: “aguja en un pajar”

Ulf Baumgärtner describe la búsqueda de los menores desaparecidos como “buscar una aguja en un pajar”. En la mayoría de los casos, los niños adoptados desconocen la existencia de sus padres, abuelos, hermanos o tíos biológicos, porque las organizaciones de adopción los declararon huérfanos. Por ello, la mayoría de las peticiones para encontrar a un familiar desaparecido provienen de los familiares salvadoreños que sobrevivieron la guerra.

Hoy en día, a más de dos décadas del conflicto armado, los desaparecidos son mayores de edad, por lo que probablemente ya no viven con su familia adoptiva o, de estar casados, podrían llevar un apellido diferente. Otro obstáculo para dar con ellos es el miedo de muchas familias adoptivas a perderlos, dificultando la colaboración con Pro-Búsqueda.

El asesor psicológico explica que, solo si el desaparecido muestra interés en descubrir sus raíces salvadoreñas y busca contacto con la comunidad latinoamericana de su país, existe la oportunidad de que se entere de la posible existencia de familiares en El Salvador. Este fue el caso de Jordan A., un joven londinense que, a través de una comunidad salvadoreña en Facebook, se enteró del trabajo de Pro-Búsqueda y decidió contactar a la organización.

Reencuentros familiares: un reto psicológico

“Todavía me acuerdo muy bien cuando lo acompañé al reencuentro con su madre. Jordan estaba muy emocionado, pero cuando nos acercamos a la casa de su familia, se puso algo nervioso y me pidió un cigarro para tranquilizarse”, cuenta Baumgärtner con una sonrisa. Desde entonces, el joven británico visita regularmente a su madre salvadoreña.

No obstante, no todos los casos esclarecidos terminan en un reencuentro familiar. El experto alemán hace hincapié en el trauma psicológico que para muchos niños, que se creían huérfanos, representa enterarse de la existencia de familiares biológicos. Por ello, en aproximadamente 100 casos, los jóvenes se opusieron a un reencuentro.

Baumgärtner asegura que, a diferencia de los niños desaparecidos en Argentina, en El Salvador, no era una práctica común que los militares se quedaran con los hijos de las personas que habían asesinado, sino que éstos eran dados en adopción.

Asimismo, las organizaciones de adopción mandaban a su personal a las zonas en conflicto para ejercer presión sobre las familias marginadas y convencerlas de entregarles sus hijos para que tuvieran “un mejor futuro”.

Baumgärtner señala que también el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) fue responsable de desapariciones: Por ejemplo, cuando las guerrilleras se embarazaban, eran expulsadas de los campamentos del frente para dar a luz en otro lugar. En un caso, una guerillera recibió una nota del FMLN llamándola nuevamente al frente acompañada de la observación “vea que hace con su hija”, a raíz de lo cual se vio obligada a encargar su niña a los vecinos.

Activistas demandan apertura de archivos militares

En agosto de 2013, Pro-Búsqueda celebra su décimonoveno aniversario de fundación. La demanda central de este festejo es la apertura de los archivos militares para facilitar la búsqueda de los desaparecidos. Baumgärtner apunta que, hasta la fecha, el personal estatal responsable alega no tener informaciones acerca de la existencia de semejantes archivos, argumentando que solo puede emprender una búsqueda respectiva por orden del presidente, como Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas.

El experto celebra que el actual gobierno salvadoreño (FMLN) instalara la Comisión Nacional de Búsqueda de Niñas y Niños Desaparecidos durante el Conflicto Armado Interno, pero también critica que el presupuesto sea insuficiente y que no contemple la búsqueda de los adultos desaparecidos. Sin embargo, el futuro de la comisión, que fue instalada por decreto presidencial, depende del resultado de las próximas elecciones presidenciales, en febrero de 2014.

En caso de que ganara un candidato de derecha, la institución podría desaparecer temporalmente, haciendo nuevamente indispensable el trabajo de Pro-Búsqueda, explica Ulf Baumgärtner. El activista alemán destaca la importancia de esclarecer las desapariciones en el país centroamericano, que también se ve afectado de forma creciente por las desapariciones de salvadoreños que emigran a los EE.UU.

Autor: Violeta Campos

Fuente: Deutsche Welle Español http://www.dw.de

Si este artículo te parece interesante, compártelo.
Facebook Twitter Plusone Linkedin Pinterest

Deja una respuesta