Un sobre rojo con una moneda y un mensaje para desear prosperidad y suerte. Esta es una de las actividades que celebraron las familias adoptantes junto a sus hijos llegados del país oriental. Durante el día de ayer celebraron el Año Nuevo Chino de la Serpiente en una jornada de reencuentro y convivencia en el Complejo Turístico de Los Escullos.
La jornada comenzó sobre las 12:00 horas con los talleres para los más pequeños. En esta ocasión, la papiroflexia y la creación de cometas fueron las principales actividades para que los niños hicieran manualidades antes de la comida. Este año, no se celebró el pasacalles como en ediciones anteriores por el tiempo, pero la fiesta estuvo garantizada con distintos bailes, dirigidos por los monitores del Complejo Turístico. No faltó la canción de moda de PSY, Gangnam Style. Un photocall sirvió para inmortalizar este día.
Mientras que los niños se afanaban para que sus creaciones quedaran perfectas, algunos padres les ayudaban y otros entablaban conversaciones sobre uno de sus mayores ilusiones, sus hijos.
En esta cita anual contaron con nuevas familias adoptantes que ya tienen a sus hijos en casa, además de los que no se pierden nunca este encuentro que ya se ha convertido en una tradición. «Aunque llevamos un año sin vernos, es una alegría volver a coincidir, es una motivación muy grande», señala una de las madres que asistió a la jornada, Aurora del Rosal.
Las nuevas familias ya han acabado con lo largo de la espera. «Es un proceso muy lento, pero el día que te llega tu hijo se te olvida todo», dice la madre.
A la hora de la llegada de los pequeños, Aurora del Rosal señala que «cuidar a cada niño es un mundo porque algunos son más fáciles, pero otros mantienen recuerdos en el subconsciente. Cuando pasan estas cosas no basta solo con el cariño que es importante y hay que llevar a los niños a profesionales. Lo importante es que antes o después se ubican bien».
Con esta actividad, los padres mantienen parte de la tradición de su país de origen para que recuerden la cultura de donde proceden. «Algunas veces me preguntan mis hijas cuando vamos a volver a China. Hemos encontrado a algunas de sus amigas que fueron adoptadas en Estados Unidos y Alemania», dice la madre.
Una de las actividades fue la entrega de unos sobres rojos con una moneda dentro y un mensaje de deseo de felicidad para este año. Todo con el objetivo de comenzar con buen pie y que la suerte vaya del lado de esa persona.
Es el segundo año que celebran esta convivencia en el Complejo Turístico de Los Escullos y las familias adoptantes agradecen la buena disponibilidad que tienen para dar las máximas facilidades.
El año pasado se celebró el Año Nuevo Chino del Dragón y los niños pudieron disfrutaron de un pasacalles con esta figura mitológica como protagonista.
Aurora del Rosal, que tiene tres hijas procedentes de China, asegura que con este tipo de convivencia «hemos formado una gran familia con unos mismo intereses, que nuestros hijos e hijas sean buenas personas, solidarios y, por supuesto, familia. Además, sirve para que nos veamos los padres y familiares que siempre viene bien por el poco tiempo del que disponemos».
Pero este encuentro no se ciñe solamente a familias de niñas de China: «Es un grupo abierto. Pueden venir padres, madres, tíos, primos, abuelos, amigos… con hijos biológicos y adoptados de cualquier país». De esta forma, disfrutaron de una jornada divertida, emotiva y, principalmente, muy oriental.
Fuente: elalmeria.es
