La búsqueda de los orígenes en la adopción como un proceso psicológico por el cual los adoptados intentan construir su identidad («quienes son») a través de completar el vacío que les dejó la separación de sus orígenes: cultura, país, familia biológica, etc. La búsqueda como proceso psicológico, presente en todos los adoptados, habría que diferenciarla de la búsqueda activa de los orígenes.
Nosotros entendemos por búsqueda activa el paso que dan algunos adoptados a solicitar el acceso a su expediente de adopción o a iniciar los trámites para ponerse en contacto con su familia biológica. También se puede entender como búsqueda activa, visitar el país o lugar de nacimiento. Generalmente, la búsqueda activa se inicia cuando los adoptados están en la etapa adulta.
En este capítulo trataremos de explicar algunos aspectos fundamentales de la etapa adulta en los adoptados y las características de los que inician la búsqueda activa de sus orígenes.
LA ETAPA ADULTA
Tras la adolescencia, los jóvenes adultos vuelven a revisar su historia pero esta vez con la capacidad de analizar los hechos desde un punto de vista más maduro y dialéctico. La adultez lleva a los adoptados a iniciar una nueva exploración de lo que significa ser adoptado y hacer frente a la perdida asociada a la adopción. Muchos de los adoptados que no tienen información suficiente sobre su historia o su familia biológica, tienen dificultades en completar el desarrollo de su identidad como personas adultas. Los adoptados se sienten desconectados de su entorno («me siento diferente, como si no encajase en ningún sitio»), presentan sentimientos de angustia ante el vacío de su conexión genética («siento como si me faltara algo, como si no estuviera completa») y tienen dificultades para integrar una adecuada imagen de si mismos (¿a quién me parezco?, ¿cómo serán mis hijos?).
El ejemplo de Ana nos ayuda a comprender la necesidad de muchos adoptados adultos de mirar atrás antes de seguir adelante con su vida. Ana, la cual fue adoptada en México a la edad de 3 años, acababa de comenzar a trabajar en un empleo que realmente le gustaba y había iniciado una relación sentimental. Ella decía que antes de formar una familia necesitaba conocer más sobre su historia, quería saber cómo era su madre biológica y si sus hermanos todavía estaban en su pueblo. Durante muchos años Ana había fantaseado con su vuelta a México y su encuentro con su familia biológica pero era entonces cuando se sentía segura de dar ese paso. Ana había decidido volver a su pueblo natal a buscar a su madre biológica y hermanos.
¿QUÉ LLEVA A LOS ADOPTADOS A DAR EL PASO DE INICIAR UNA BÚSQUEDA ACTIVA DE SUS ORÍGENES?
No existe una única razón para iniciar la búsqueda si no que cada adoptado tiene la suya propia; suele ser una pregunta, un interrogante que el adoptado tiene sobre sí mismo (¿cómo es el lugar donde nací?, ¿cómo será mi madre biológica?, ¿me parezco a ella?, etc.) La búsqueda activa es siempre el intento de encontrar una respuesta. Aunque algunos adoptados sólo solicitan el acceso a su expediente de adopción, muchos desean también visitar el lugar donde nacieron y conocer a su madre biológica o hermanos. La cantidad de información que necesitan para contestar a las preguntas y hasta donde van a llegar para conseguirla depende de cada persona adoptada. El momento de inicio de la búsqueda suele estar relacionado con algún acontecimiento de cambio o de perdida en la vida de los adoptados (matrimonio, embarazo, muerte de los padres adoptivos, etc.). Una de las circunstancias que despierta con más frecuencia el deseo de búsqueda es la formación de la propia familia. El deseo de tener hijos, un embarazo o el propio nacimiento de un hijo, estimulan el interés por el estado de salud de los padres biológicos así como las posibles enfermedades familiares.
CARACTERÍSTICAS DE LOS ADOPTADOS QUE DAN EL PASO A UNA BÚSQUEDA ACTIVA
La mayoría de los adoptados que dan el paso tienen una edad comprendida entre los 20 y 30 años. Suelen ser más mujeres que hombres, muchos de ellos están casados y tienen hijos biológicos. Se ha visto que la búsqueda activa es más común en los adoptados que se sienten «diferentes», esto suele ocurrir en los adoptados que provienen de una etnia diferente a sus padres adoptivos, y en aquellos adoptados que tienen vivos recuerdos sobre su historia o las personas con las que convivieron (padres o hermanos), como es el caso de la adopción de niños mayores.
RESULTADOS DE LA BÚSQUEDA ACTIVA
Normalmente, antes de que los adoptados se decidan a dar el paso de iniciar la búsqueda activa de sus orígenes, han fantaseado durante años sobre ello. Muchos adoptados idealizan el encuentro y a su familia biológica antes de iniciar la búsqueda. El miedo a que sus fantasías no se cumplan hace que el adoptado muestre durante la búsqueda sentimientos ansiedad, nerviosismo y excitación. Tomar la decisión de iniciar la búsqueda es para el adoptado un momento intensamente emocional. Por ello, es necesario que los adoptados adultos cuenten con profesionales que le asesoren sobre los pasos a seguir en su búsqueda, con psicólogos que les apoyen y puedan escuchar sus sentimientos de ambivalencia. Según nuestra experiencia, aunque la búsqueda activa no llegue siempre al final esperado, casi la totalidad de los adoptados que inician la búsqueda activa de sus orígenes se alegran de tener más información sobre su historia y afirman que les ha producido cambios positivos en su vida. En el próximo artículo trataremos la importancia del papel de los padres adoptivos en el proceso de búsqueda de sus hijos adoptados.
Fuente: Revista Niños de Hoy, nº 11
