Aprendiendo a estudiar (mejor)

Esta mañana hablamos de los buenos propósitos, uno de ellos es mejorar nuestra forma de estudiar: saber organizar nuestro tiempo, nuestras tareas y ser responsables de ellas.

Para ello vamos a ver algunas pautas que os pueden ayudar. Quizá al principio os parezca un poco complicado y tenéis que echarle un vistazo a las pautas para seguirlas; sin embargo, en cuanto lo hagáis dos o tres días, conseguiréis aprenderlo y hacerlo casi sin daros cuenta.

Lo primero que debemos hacer es BUEN uso de la agenda, y digo buen uso, porque de nada sirve apuntar todo muy clarito si después no la miramos para ver qué tenemos que hacer o no comprobamos que hemos acabado todo.

Otro punto importante es el horario de estudio. Sé que la mayoría tenéis actividades después de clase, pero debéis intentar tener un horario más o menos igual todos los días para poneros a estudiar. Así, vuestra cabecita se acostumbra y no os cuesta tanto.  Debéis configurar un horario y cumplirlo: mirad a qué hora llegáis de clase o de la actividad a la que vayáis (Inglés, baloncesto…), calculad el tiempo de descanso y fijad una hora para empezar. Es bueno tener un tiempo de descanso antes de ponerse a la tarea; no os pongáis según llegáis del cole. Ese tiempo de descanso podéis aprovecharlo para merendar y estar con la familia.

También es importante tener un lugar de estudio adecuado, lejos de ruidos y/o cosas que nos puedan despistar (tele, hermanos jugando…). Debemos tener nuestro material a mano, pero no todo encima de la mesa; ésta debe estar despejada. Comprobad que tenéis buena cantidad de luz (aprovechad la natural siempre que podáis).

Una vez que estamos en nuestra mesa, lo primero que hacemos es sacar nuestra agenda y ver qué tareas tenemos para organizarnos el trabajo. Por ejemplo: ejercicios de Matemáticas, preparar un dictado, estudiar Religión y estudiar Conocimiento del Medio. ¿Por dónde empezamos? Pues vamos a escoger algo que nos resulte sencillo, ya que todavía no estamos concentrados.

Cada uno debe pensar qué es sencillo para él/ella. Lo siguiente que haremos será algo que nos cueste más, porque ya estamos concentrados, pero todavía no estamos cansados (por ejemplo, estudiar un tema). Dejaremos para el final tareas que no nos cuesten demasiado.

Es conveniente hacer una pausa cuando llevamos aproximadamente una hora trabajando. No dejéis una tarea a medias; cuando acabéis una asignatura, hacéis un descanso de unos 10-15 minutos (bebemos agua, vamos al baño, charlamos con nuestros padres o hermanos… pero NO nos enganchamos a la tele, porque luego nos costaría mucho volver a la tarea y perderíamos el nivel de concentración que habíamos conseguido). Intentad no levantaros de la mesa excepto en la pausa; si se os ocurre algo que tenéis que decir o hacer, apuntadlo en un papelito para hacerlo después.

No se os olvide que es imprescindible estudiar/repasar lo que hemos visto en clase ANTES de hacer los ejercicios de ese tema: ¿Empezaríais a jugar a algo nuevo sin saber las reglas antes? Pues esto es lo mismo.

A veces os encargamos trabajos para dentro de un tiempo (dos días, una semana…). No lo dejéis para el último día. Aprovechad los días que tengáis menos deberes o dispongáis de más tiempo para ir adelantando.

Ya al final, debemos comprobar que hemos tachado todas las tareas pendientes de nuestra agenda y que llevamos en la mochila TODO el material necesario para el día siguiente (controles firmados, cuadernillos, material de Artística…). Si os acostumbráis a hacer esto antes de dejar la mesa de estudio, os aseguro que pasaréis menos apuros buscando vuestras cosas en clase. Recordad que uno de los objetivos que nos hemos propuesto es SER RESPONSABLES de nuestras tareas.