China ha anunciado la prohibición para individuos y grupos de adoptar de forma privada a bebés abandonados; en un país donde cientos de miles son abandonados cada año y donde el tráfico de bebés ha sido un problema permanente.
El Ministerio de Asuntos Civiles dijo que las personas que encuentren un niño abandonado deben dar aviso inmediatamente al comité residencial y a la policía y no adoptar al niño voluntariamente.
El abandono de niños es un importante problema en China. La estricta política de hijo único – que limita a la mayoría de las parejas en las ciudades a un solo hijo y a las parejas en sitios rurales a dos, si su primer hijo es una niña- y una preferencia tradicional por los niños resulta en el abandono de niñas y de niños discapacitados. La pobreza y el estigma social para las madres no casadas, también son factores contribuyentes.
Las leyes de adopción chinas prohiben el tráfico de bebés y el tráfico de bebés abandonados en nombre de la adopción, pero no menciona si los individuos tienen permiso de quedarse a los bebés abandonados. Las nuevas leyes, que prohiben quedarse con dichos bebés, son esbozadas en un documento puesto en el sitio electrónico del Ministerio de Asuntos Civiles.
Las nuevas reglas dicen que las personas que quieran adoptar, deben hacerlo a través de canales oficiales y reunir los requisitos, los cuales bajo las leyes chinas, incluyen estar saludable, tener más de 30 años y no tener hijos.
Aquellos que utilicen a los niños abandonados para fines ilegales y lucrativos, serán severamente castigados, de acuerdo con las nuevas leyes.
El documento también especifica las medidas que deberán ser tomadas cuando se encuentre a un bebé abandonado, requiriendo que la policía intente dar con los padres o tutores y en caso de no conseguirlo, trasladar a los niños a una casa de asistencia aprobada por el gobierno para su cuidado temporal. Estas casas sólo podrán recibir a los niños bajo cuidado oficial si no se encuentra a ninguno de los tutores en determinado período.
El sistema estatal de orfanatos chino, habitualmente escaso de financiación, no ha sido capaz de proveer adecuadamente refugio para los muchos niños que han sido abandonados, por lo que tales servicios con frecuencia se dejan a los particulares con algunos recursos y sin autoridad legal.
En enero, el problema alcanzó un nuevo nivel cuando un incendio en un orfanato ilegal terminó con la vida de seis niños y un adulto joven.
Zhou Xiaozheng de la Escuela de Sociedad y Estudios de Población de la Universidad Renmin dijo a los medios que alrededor de 200,000 bebés son abandonados cada año en China.
“Es bueno que el gobierno fortalezca su manejo de los niños abandonados, pero también le traerá ganancias, porque cualquier adoptante en potencia debe pagar una bonita cuota de adopción” dijo Zhou.
Fuente: http://spanish.china.org.cn
